Tu marca es tu esencia, y de esto los de Apple saben mucho, gozando de un séquito de fans y consumidores de sus productos y filosofía distribuidos a lo largo y ancho del planeta siempre expectantes a lo que una de las marcas líderes en tecnología presenta como sus nuevos productos y apareciendo estos dispositivos en los primeros puestos de Google tan solo con poner Apple en el buscador. Esta semana es el turno de iPad Pro, que llega a España con el objetivo de dar un impulso a la venta tabletas que se ha visto en decaimiento los últimos trimestres.
Para ello, Apple presenta su iPad Pro dando un giro a lo que hasta ahora nos ofrecían las tabletas, consumir contenido, y han adaptado uno de sus dispositivos estrella para que persiga otro fin, la productividad. Apple crea el iPad con la pantalla más grande hasta la fecha, 12,9 pulgadas para la pantalla Retina del iPad Pro que tiene 5,6 millones de píxeles y a la que acompañan potentes especificaciones técnicas y accesorios como el lápiz «Apple Pencil» y un teclado físico “Smart Keyboard” que lo convierten en un dispositivo que se aproxima más a ser un ordenador y permitir desempeñar tareas como la creación de contenido de forma fácil, potente y precisa dejando de lado las limitaciones de la pantalla táctil.
El iPad Pro está dotado con un microprocesador A9X que dobla en rendimiento y potencia a su antecesor según Apple, y que acompañado de 2 Gigabytes de Ram y almacenamientos de 32 y 128 Gigabytes en sus respectivas versiones pretende aportar el rendimiento y soluciones que demanda un mercado más profesional que de ocio.
Pese al tamaño de su pantalla, que hace que las dimensiones crezcan, el iPad Pro es igual de fino que el iPad Air 2, haciéndolo así un dispositivo portable orientado a la movilidad como requiere un uso laboral.
Otro indicador del giro de pensamiento experimentado por Apple, son los precios del iPad Pro, que no son en absoluto adaptados al consumidor medio, ya que los precios oscilan entre los 899 y los 1299 euros, precio que la gran mayoría de los mortales considerarán para una herramienta de trabajo más que para un dispositivo dedicado al entretenimiento.
No son pocos los desarrolladores que en vista de la llegada del iPad Pro como herramienta de trabajo y productividad, se encuentran creando aplicaciones de las que esperan un buen posicionamiento en el mercado de las App ofreciendo sus servicios a diseñadores, ingenieros o fotógrafos entre otras profesiones.
Apple hace un rebobinado en el tiempo, y para adaptarse al mercado y buscar oportunidades, convierte su dispositivo de ocio en una herramienta empresarial con el objetivo de abrir mercado para su producto, y su marca, le ayudará en este propósito puesto que ya existen otros productos como la Surface de Microsoft en el mercado orientados a este fin.
¿Le dará buen resultado esta estrategia de marketing a Apple?