Cada mañana antes de salir de casa tenemos por costumbre mirar en un espejo nuestro aspecto. Asimismo, las empresas están pendientes de cómo les ve su competencia; y, sobre todo, sus clientes. El mundo digital no es ajeno a esto. En Internet, es importante cuidar de la identidad digital de la empresa, o dicho de otra forma, de cómo los usuarios de la Red perciben a la empresa. Es lo que se conoce como reputación online.
¿Por qué es importante la reputación online?
En el comercio tradicional saben muy bien que un escaparate atractivo puede tener más posibilidades de atraer a nuevos clientes y, si el servicio es bueno, fidelizarlos. Lo mismo ocurre en Internet. La web es el escaparate digital de la empresa. Para encontrar a su empresa, los potenciales clientes navegan a través de buscadores como Google. Por ello, es importante estar entre los diez primeros resultados de búsqueda. Pero con trabajar los aspectos relativos al SEO y/o campañas SEM no es suficiente.
De hecho, Google tiene cada vez más importancia como gestor de la reputación online, al menos en el mercado español, ya que cada vez es mayor el peso generado por la web social (resultados de imagen, resultados de vídeo, resultados en tiempo real). Todos estos factores influyen a la hora de posicionar una empresa en los resultados de búsqueda. Por este motivo, es de crucial importancia cuidar otros aspectos para provocar una imagen positiva de la empresa. Entre estos factores caben destacar: el uso de un lenguaje adecuado, saber reaccionar ante una mala crítica de forma positiva, fotografías apropiadas, entre otros.
Piensa que en Internet no sólo es mirar, como ha ocurrido con los medios de comunicación tradicionales, sino que los usuarios y potenciales clientes también opinan y pueden estar hablando de su marca. Puede que digan cosas positivas, pero puede que también negativas (quejas de un producto o servicio) y que estén influenciando negativamente a otros usuarios. Es importante ver qué es lo que dicen los usuarios sobre su empresa para tomar las medidas correspondientes, así como conversar con ellos. De esta forma, la reputación online de la empresa mejorará.
Ten en cuenta que la reputación es el reflejo de prestigio de una marca o persona en Internet. A diferencia de la marca, que se puede generar a través de la publicidad, la reputación no está bajo el control de tu organización, sino que la crean el resto de personas cuando conversan o aportan sus opiniones. En Internet, es muy sencillo verter todo tipo de informaciones y opiniones que pueden perjudicar a la imagen de su empresa y que ha de saber gestionar.
Por todo lo expuesto anteriormente, es recomendable que cada empresa construya una sólida identidad digital que camine de la mano con la optimización social. En definitiva, debes cuidar tu reputación online porque de ella dependerá su éxito. Si no sabes por dónde empezar, en Serinfor Marketing podemos ayudarte, consúltanos sin compromiso.