Cómo solucionar el problema de la memoria caché

Si cuentas con una página web, seguramente te hayas encontrando con la situación de que has modificado algún artículo o incluso has subido uno nuevo. Pero no ves los cambios. Cierras y abres el navegador más de 20 veces, pero que no hay manera. Refrescas la página desde el propio navegador. ¡Y tampoco! Así que entras en un proceso de enfado (por decirlo suavemente).

Este es un problema habitual que nos solemos encontrar en Serinfor Marketing. Y así se lo explicamos a nuestros clientes. Cuando se realizan cambios o modificaciones en una web, a veces no se ven debido a la memoria caché.

¿Qué es la memoria caché?

Cuando navegas por Internet y accedes a una página web, tu navegador envía una petición a al servidor donde está alojado dicha web.  Este recibe todos los textos, imágenes, vídeos, CSS, HTML, PHP… con los que está realizada dicha página. El navegador los reinterpreta y te muestra esa página web en tu pantalla para que puedas leer aquello que te interesaba.

Todos estos datos se guardan en la memoria caché de tu navegador para si haces la misma consulta, esta salga de manera inmediata. Así cuando regresas a esa página, el navegador solo pide lo nuevo que se haya incorporado al sitio web, reduciendo así el tiempo de carga en la web.

Esto lo habrás notado cuando accedes por primera vez a una página. Esta tarda un poco en cargar. A la siguiente visita que realices, cargará mucho más rápido que en esa primera vez que acudiste al sitio.

Sin embargo, tenemos que tener en cuenta que quien controla esa caché es el servidor, no el navegador. Aunque no se quedan de forma permanente. Los elementos que has descargado desde el servidor a tu navegador y tienen un tiempo limitado. Por lo que si, por ejemplo, hace un mes que no visitas una página, esta tardará en cargarse lo mismo que si fuera la primera vez que accedes a ella.

Cómo solucionar el problema de la memoria caché

¿Cómo veo los cambios realizados en mi página?

Normalmente, no notamos ese proceso de la memoria caché. Pero  si los cambios se han producido en un breve espacio de tiempo,  puede ocurrir que no los veamos. En este caso tenemos dos opciones:

  • Borrar la caché de nuestro navegador a través de la configuración de este último.
  • Simplemente pulsar la combinación Control+F5. De este modo se refrescará la página con la última información añadida a la web.

¿Te ha sido de utilizad este  truco?

Deja un comentario